Me gusta el peligro -de vez en cuando-, supongo que por eso estoy contigo. Aunque no sé sí esto que hacemos es ''estar'', pero me gusta. No me gustas tu, pero me gusta lo que hacemos, las cosas que decimos, cómo nos tratamos.
Me gusta como me besas, mas no me gustan tus labios.
(Miento, la verdad si me gustan)
Y es extraño, porque me han advertido tanto de ti, y soy consiente de lo que has hecho, pero aún así te busco, porque la verdad es que estoy buscando algo que me mate. No me bastan el alcohol, los cigarros, las horas inconsciente... ahora también entras tu en la lista.
Les avisaré cuál me mata primero.